En los barrios de Santo Domingo, hay un fenómeno que se está apoderando de esos lugares. Se trata de relaciones amorosas triangulares o cuadrangulares de hombres con mujeres o viceversa.

Me explico: en los últimos tiempos, estar un hombre o una mujer consciente de que su pareja, está teniendo una relación sentimental con otra persona es normal.

En estos días, mientras visitaba en el barrio a mi hermana, me di un desenlace de una de esas situaciones. Una mujer con unos seis meses de embarazo, armada con su barriga y sus dientes, penetró a la casa de la vecina del frente y, sin mediar palabras, propinó tremenda mordida a una jovencita que ahí se encontraba.

A su salida, vociferó a la flamante pareja de la joven: “Tú eres un Venao consciente. Tu mujer se está tirando mi marío”.

Yo, que en mi vida no había escuchado el término, le pregunté a mi hermana que cuál era el significado del término, a lo que respondió con una gran carcajada: “un vena’o consciente es a quien le gusta su asunto; pero que esté sopeteao por otro”.

Realmente, no sé qué pasa en nuestra sociedad. No sé si esto se vivió en los tiempos de mis padres, pero pienso que la falta de educación es la ley que impera en nuestros barrios