El alto funcionario uasdiano hizo tal señalamiento al pronunciar el discurso central durante la investidura de 72 nuevos profesionales en el Centro UASD-Hato Mayor, donde enfatizó que abriéndose al pueblo, la más antigua universidad del Continente Americano se fortalece y adquiere los estándares de calidad requeridos a nivel nacional e internacional.
Asimismo, el académico precisó que esa casa de altos estudios no puede ser indiferente ante lo que sucede en su entorno y parodiando un pasaje bíblico expresó que esa institución “debe llorar cuando la comunidad llora y reír cuando la comunidad ríe.”
Al felicitar a los graduandos, Asjana David les exhortó a ponerle valor agregado a todo lo que hagan, como profesionales dispuestos a servir, no a servirse, y que es preciso que hoy la UASD toque -una vez más- a sus conciencias, para que asuman con vocación de servicio, honestidad y actitud responsable, las posiciones en que los sitúe la sociedad dominicana.
El Vicerrector Docente dijo confiar que todos y todas tengan valor suficiente para seguir el pensamiento del apóstol de la independencia cubana, José Martí, quien recomendó trabajar y vivir de manera que la patria sea ara y no pedestal.
En otra parte de su exposición, el funcionario de la Primada de América destacó que los mayores y mejores esfuerzos del Centro deben ir dirigidos a ponerse, cada día, en mayor sintonía con su entorno social y resaltó que esa instancia
universitaria debe seguir mejorando los servicios administrativos, las condiciones y calidad de la docencia para afianzar la excelencia académica.
Durante su comentario, Asjana David reflexionó que el triunfo de la Universidad, al graduar a los 72 nuevos profesionales, es también una victoria de toda la comunidad hatomayorense y ponderó la importancia de que la que la población se sienta orgullosa de tener a esta institución al alcance de sus manos.
Finalmente, sostuvo que la calidad del acto académico en la ciudad de Hato Mayor es una muestra elocuente de cómo, en todo el territorio nacional, la Universidad Primada de América, ha venido adecuándose los procesos de cambios rápidos que caracterizan a los tiempos actuales.
Durante el acto de graduación, las autoridades universitarias tomaron el juramento a seis licenciados en administración de empresas y 26 en administración de empresas turísticas y hoteleras, así como un licenciado en Producción Animal.
Los otros 39 investidos fueron un licenciado en Educación, mención Filosofía y Letras y 38 en Educación Básica.
De los nuevos profesionales, nueve alcanzaron honores Cum-Laude, encabezados por Shirley Celeste Robles Peña, con 89.9 de promedio en la carrera de Administración de Empresas Turísticas y Hoteleras, y quien tuvo a su cargo las palabras de agradecimiento a nombres de sus compañeros.
Además, alcanzaron lauros académicos Anny Leidy García y Graciela Reyes González, quienes terminaron sus promedios en 88.8 y 87.8, respectivamente.
También, Emely Anahay Ubiera Sosa, Yeiry Félix Javalera, Rosa Lidia Echavarría Pacheco, Luz del Alba Tejeda Vilorio, Brayan Vladimir Soriano Rodríguez y Dioniris Vilorio Ramos.
A la actividad asistieron autoridades civiles y militares, así como representantes religiosos y demás sectores sociales de la colectividad hatomayorense.