El izamiento se producirá a partir de las siete y 45 minutos de la mañana frente a la estatua del patricio Juan Pablo Duarte, ubicado en la Alma Máter.
Será encabezado por la rectora Emma Polanco Melo, junto a los vicerrectores Docente, Administrativo, Extensión e Investigación y Postgrado, maestros Alejandro Ozuna, Pablo Valdez, Antonio Medina y Mauro Canario, respectivamente.
También estarán los integrantes de la Fundación Comité Permanente 9 de Febrero del 1966.
Concluido ese acto, las autoridades universitarias acompañarán a los miembros de esa Fundación en una ofrenda floral que harán en la esquina formada por las calles Moisés García y Doctor Báez, frente al Palacio Nacional.
En ese lugar fue donde cayeron las víctimas del ametrallamiento ejecutado por las fuerzas policiales.
De esa ofrenda, los asistentes se trasladarán al antiguo cementerio de la avenida Independencia para participar en un acto que será realizado en la tumba de Amelia Ricart Calventi.
Ya a las cuatro de la tarde, los alumnos del liceo que lleva el nombre de esa malograda dirigente estudiantil, harán un acto artístico-cultural con la participación de los grupos pertenecientes a la UASD y el Ministerio de Cultura en el Aula Magna.
El ametrallamiento
Para esa ocasión, la Federación de Estudiantes Dominicanos (FED), con su líder Amín Abel Hasbún a la cabeza, marchó pacíficamente a la sede del gobierno.
El objetivo exigido era –en primer lugar- la salida del país de las tropas norteamericanas que pisoteaban el suelo patrio desde el 28 de abril del 1965.
Asimismo, la inmensa multitud estudiantil reclamaba la entrega del presupuesto a la UASD y el reconocimiento de las autoridades elegidas por el Movimiento Renovador Universitario, MRU.
El Movimiento Renovador Universitario estaba conformado por los sectores democráticos de la UASD.
A las diez antes meridiano de ese día, mientras los dirigentes estudiantiles de esa época esperaban ser recibidos por el entonces presidente provisional Héctor García Godoy, un efectivo policial dio inicio al ametrallamiento.
En la acción represiva resultaron muertos cuatro estudiantes, decenas de heridos y centenares de presos.
Quienes fallecieron a consecuencia de esa masacre fueron Amelia Ricart Calventi, Antonio Santos Ramírez, Luis Jiménez Mella y Miguel Tolentino.
Los jóvenes Brunilda Amaral y Antonio –Tony- Pérez resultaron heridos con disparos que les ocasionaron lesiones permanentes en la columna vertebral.
Desde ese entonces, deben caminar en sillas de ruedas.
Después de la balacera en contra del movimiento estudiantil, la sociedad dominicana se indignó, trayendo como consecuencia muchos disturbios y una huelga general.
Durante casi una semana, hubo toda clase de acciones violentas, incluyendo las muertes trágicas de varios policías y civiles, además de muchos heridos, presos y quemas de vehículos y propiedades gubernamentales.
A los pocos días, García Godoy debió reconocer a las nuevas autoridades surgidas del MRU y entregar los fondos retenidos a la primera universidad fundada en el continente americano.