Grullón Fernández, al pronunciar el discurso central de la actividad, expresó que esa institución académica, persuadida de su misión de resaltar a los más sobresalientes ejemplos de las ciencias y las humanidades, se complace en hacerle entrega del título a la distinguida escritora por su contribución a la literatura del Caribe, especialmente la producida en La Española y en el país.
Manifestó que a sus estudios se debe la valorización de la literatura caribeña y particularmente ladesarrollada por escritoras de Cuba, Santo Domingo, Puerto Rico, Colombia y Costa Rica en el siglo XVI, y en los siglos XIX y XX, lo cual ha permitido el rescate de textos realmente valiosos y, como consecuencia de ello, se ha hecho más visible un nuevo mapa que incluye una presencia literaria femenina destacada.
Resaltó que la recipiendaria es poseedora de un talento poco común, el cual ha cultivado con esmero durante años para convertirse en una de las personas mejor valoradas en el mundo de las letras, principalmente por sus trascendentes investigaciones sobre la literatura de la región del Caribe.
El rector de la UASD agregó que es una persona fuertemente fundamentada en los valores, entre ellos el trabajo, la solidaridad, la amistad y el amor a la familia.
“Este último valor es tan poderoso en su vida, que ha querido agregar emoción a este acto académico con la presencia de varios miembros de su entorno familiar, quienes participan como testigos de excepción en este acceso de ella al número de los profesores honorarios de la más antigua Universidad del Continente Americano”, destacó Grullón Fernández.
Felicitó a la homenajeada, porque a partir de hoy forma parte de la familia universitaria al convertirse en la nueva “Profesora Honoraria” de la academia, que en pocos meses cumple el 479 aniversario de su fundación.
La propuesta de otorgar este título de “Profesora Honoraria” a la distinguida escritora internacional fue aprobada por el Consejo Directivo de la Facultad de Humanidades, la cual fue refrendada por el Consejo Universitario, mediante la Resolución No. 2017-059, de fecha 05 de abril del año en curso.
De su lado, Vanderplaast de Vallejo argumentó que es un gran honor recibir la distinción y el privilegio de ser investida por la más antigua Universidad de las américas.
Añadió que en tantos años de arduo trabajo nunca pensó que podría merecer distinción tan superior por esta academia, la cual se encuentra en el centro de su espíritu personal y profesional, ya que ha sido por tradición la institución en la cual muchos miembros de la familia Vallejo se han formado.
La Profesora Honoraria de la UASD también firmó el libro de “Visitas Distinguidas”, y expresó “agradezco a la más antigua Universidad de las américas por permitirme hacer historia, desde aquí inicié mis estudios como investigadora y le tengo un gran aprecio, porque mi esposo es egresado de esta Universidad”.
En la actividad también estuvieron presentes los miembros del Consejo Universitario; Ylonka Nacidit Perdomo, escritora dominica; Jeannette Miller, Premio Nacional de Literatura; Ofelia Berrido, representante de la Academia Dominicana de la Lengua, así como el esposo de la recipiendaria, Rafael Horacio Vallejo Botello y otros familiares.
Sobre la Recipiendaria
Vanderplaast de Vallejo es canadiense, de ascendencia holandesa, destacada académica, investigadora, crítica literaria y especialista en literatura caribeña, Profesora Emérita, de Concordia University en Montreal.
Se dedicó al estudio de la literatura de Hispanoamérica en la Universidad de Montreal, donde obtuvo su doctorado con un estudio de la teoría del cuento hispanoamericano contemporáneo y, desde entonces, inició sus viajes por el Caribe tras las huellas de autoras coloniales y de los siglos XIX y XX, cuyos textos estaban ubicados en la marginalidad.
Ha escrito en español la mayor parte de sus estudios críticos. Su preocupación permanente en su labor ha sido saber “cómo llegamos, dónde estamos, y por qué estamos donde estamos”, y su tema de interés como paradigma es el cuestionamiento en profundizar el conocimiento del entramado ideológico de cada texto de mujer, para recuperar la historia contada.
La recipiendaria tiene más de dos décadas viajando por el Caribe, acudiendo a archivos y bibliotecas nacionales, interactuando en congresos, simposios y con especialistas de distintas lenguas y culturas para redescubrir un pasado, una memoria de una mujer, de siglos, oculta, de la cual se tiene certidumbre, pero pocos documentos hallados e investigados a fondo y publicados.
Por su trayectoria Vanderplaats de Vallejo deja un legado en el presente, a la historicidad de la literatura escrita por la mujer, independiente de la jerarquía del poder, las dicotomías, las crónicas de aprisionamiento en las cuales el sujeto femenino ha sido arrojado al olvido a través de estereotipos que deforman su existir, y por medio, a la vez, de narraciones llenas de arbitrariedades en torno a épocas, episodios o sucesos que crearon un cisma entre el tiempo y la creación de las autoras-protagonistas de su discurso.
Ha publicado ensayos sobre cuentistas caribeñas, dentro de las que se destacan: Emilia Macaya, de Costa Rica; Adelaida Fernández, de Cuba y Mujeres como islas, de República Dominicana.