La actividad estuvo encabezada por el vicedecano, maestro Augusto Bravo Mena, quien advirtió que el derramar desechos y sustancias tóxicas en los ríos Ozama, Isabela y el litoral del Mar Caribe, constituye una amenaza para la salud de los munícipes del Gran Santo Domingo, que las autoridades de Medio Ambiente deben encarar más temprano que tarde.
Bravo Mena expresó que en ocasión de la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente, en modo alguno debe pasar desapercibida esa mala práctica empresarial, que aunque forma parte de la cotidianidad, sin duda alguna es una amenaza latente para la salud ambiental y la sana vida de los capitalinos.
Recomendó al sector empresarial a hacer conciencia e instalar plantas de tratamiento para evitar este mal, de lo contrario dijo ser partidario de que las autoridades dispongan multas y canalicen sanciones ante los organismos jurisdiccionales, a quienes de manera alegre violanlos Derechos Colectivos y de Medio Ambiente consagrados en la Constitución y en la Ley 64-00 Sobre Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Hizo un llamado a la familia universitaria para crear una cultura de respeto al medio ambiente y al ecosistema y a enfocarse en la protección de los recursos naturales y con ello a la preservación de la salud de la población.
El funcionario universitario anunció que con la jornada de siembra de árboles inicia una nueva era para apadrinar la Facultad de Humanidades, que deberá extenderse por toda la sede central de la UASD, sus Recintos, Centros y Subcentros, pues sostuvo que existe un marco legal suscrito entre la Universidad y el Jardín Botánico Nacional (JBN) para la siembra de distintas plantas que contribuyan a reforestar la academia estatal.
Dijo que el Botánico facilitará todas las plantas que necesita la Primada de América para reforestar, al tiempo de informar que se iniciará un proceso de rotulación para identificar las distintas especies sembradas, de modo que se tenga un criterio para su manejo y tratamiento.
Sobre la identidad florística del país
La Rosa de Bayahíbe pertenece a la familia de las cactáceas y es uno de los pocos cactus que tiene hojas. Es originaria de la República Dominicana, encontrándose exclusivamente en las proximidades del poblado de Bayahíbe, en la región Este del país.
Fue descubierta en 1977 por el botánico francés Alain Liogier, en Bayahíbe, y fue declarada especie nueva para la ciencia en 1980. Tras años de investigaciones y exploraciones por parte de biólogos del Jardín Botánico Nacional, sólo encontraron ejemplares machos (con flores masculinas), por lo que la reproducción de la planta debió hacerse por esqueje o estaca.
La jornada de siembra de árboles se llevó a cabo conjuntamente con el departamento de Ornato de la UASD y el programa Silencio, Orden y Limpieza, SOL, así comocon el auspicio del JBN, en la persona de su director, doctor Ricardo García.
En la actividad estuvieron presentes además, el vicedecano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, maestro Alexis Martínez; el ex decano de Ciencias, maestroCecilio Varela;el director de la escuela de Comunicación Social, maestro Rodolfo Coiscou Duvergé; el académico Julián Sosa, y el licenciado Bienvenido Polanco.