El funcionario uasdiano resaltó la valentía y el indoblegable espíritu de lucha de Germán Aristy, Miguel Cocco y sus compañeros, quienes el 12 de enero del 1972, durante el gobierno de Joaquín Balaguer, dieron una contundente demostración de valor y sacrificio por las libertades públicas y la democracia en República Dominicana.
Asimismo, destacó el denuedo de Virgilio Perdomo, Bienvenido Leal Prandy (La Chuta) y Ulises Cerón Polanco, a quienes consideró como los revolucionarios protagonistas de una de las grandes epopeyas del movimiento social de nuestro país.
Nino Fèliz exteriorizó estas consideraciones durante el celebrado este martes en el monumento levantado en la Autopista de Las Américas, en la entrada de la cueva en donde estos jóvenes sacrificaron sus vidas frente a más de dos mil efectivos del Ejército, la Marina de Guerra, la Fuerza Aérea y la Policía Nacional.
El académico y poeta ponderó que esos luchadores revolucionarios ofrendaron sus vidas para que hoy la patria de Juan Pablo Duarte, Francisco del Rosario Sánchez, Ramón Matías Mella, Gregorio Luperón y Francisco Alberto Caamaño Deñó disfrute de libertad.
Al reflexionar sobre los acontecimientos acaecidos a principios de la década del 1970 y bajo el férreo mandato del fenecido Joaquín Balaguer, estimó que ese enfrentamiento fue desigual y estimuló al pueblo dominicano para que mantenga firme su bandera de combate.
También resaltó que esos bizarros hombres dieron una elocuente demostración de su convencimiento y decisión para no ceder un ápice en su objetivo de que se respeten los Derechos Humanos, tras considerar el hecho como una demostración que repercutirá con hidalguía en todos los que aman las libertades democráticas en esta media isla.
"Este fue un hecho de suma importancia patriótica porque nos proyecto un ejemplo digno de ser asimilado por los presentes y futuras generaciones y el ejemplo de estos héroes siempre vivirán en las almas de las personas que luchan por el bienestar social del pueblo", concluyó diciendo Nino Féliz.