Esta vez, encabezados por el doctor Iván Grullón Fernández, los integrantes del Consejo Universitario se dieron cita en su moderno salón de sesiones y entregaron el diploma y la esclavina, símbolos que acreditan a Castañeda Heuberger como “Profesor Honorario” de la Facultad de Ciencias de la Salud.
El sobresaliente profesional de la medicina, acompañado por algunos de sus familiares, amigos y relacionados, recibió la alta distinción emanada de la más antigua universidad del continente americano. Las autoridades universitarias dominicanas entendieron que, el nacido en Italia, de madre nicaragüense y padre guatemalteco, tiene todas las cualidades que lo hacen merecedor de esa distinción.
El ya encanecido hombre de ciencia, además de sus valiosas investigaciones al servicio de la humanidad, es un maestro de sólida carrera en la formación de millares de hombres y mujeres que se destacan en diversos campos de la medicina. Se graduó como médico en 1951, en la Universidad San Carlos, de Guatemala, recibiendo en el 1958, el premio Justo Rufino Barrios, por ser el más sobresaliente de su promoción.
Al especializarse en cirugía cardíaca pediátrica, avanzó sus estudios y se convirtió en el pionero mundial del tratamiento quirúrgico de enfermedades congénitas en esa área. Sus investigaciones en la Universidad de Minnesota fueron las primeras en el aspecto de cirugía de corazón abierto utilizando circulación cruzada controlada. Asimismo, el comienzo del uso clínico de oxigenadores artificiales se debe a su diseño.
De igual modo, entre 1956 y 1957, aún siendo estudiante, Castañeda trabajó en estudios experimentales bajo la orientación del profesor Eduardo Lizarralde, que lo impulsaron al inmenso mundo de las investigaciones médicas.
Para esa ocasión, en la Universidad de San Carlos, sus experimentos consistieron en poner a perros bypass cardiopulmonares utilizando una bomba sigmamotoro y un oxigenador de burbuja helicoidal de Wall.
Después, en la Universidad de Minnesota, se introdujo en las indagaciones sobre el Gott Doudimensional desechable.
Esas investigaciones, que fueron los temas de su tesis doctoral, revelaron su extraordinaria visión en el campo de la medicina en América Central.
Ya para el 1963, Castañeda Heuberger alcanzó la designación de instructor del Departamento de Cirugía en la Universidad de Minnesota, pasando con notas extraordinaria los exámenes requeridos para ocupar ese importante cargo.
Los círculos de la medicina mundial lo reconocen como uno de los pioneros de la cirugía cardíaca pediátrica y su contribución al tratamiento de esas enfermedades.
Al retirarse como líder del Hospital de Niños de Boston y de la Escuela de Medicina de la Universidad, regresó a su Guatemala querida para seguir su misión en favor del avance de la medicina en el continente americano.
Por esas y muchas otras cualidades, el rector Grullón Fernández proclamó en el acto de investidura, que para la UASD era una honra declarar a ese ilustre médico e investigador como profesor honorario de la Primada de América.