Se trata de un programa ejecutado por las investigadoras Kathryn Derose, de la Universidad de Massachusetts Amherst, y su comparte nacional, maestra Amarilis Then, docente de la escuela de Salud Pública de Primada de América.
El evento, realizado mediante la Dirección y el Instituto de Investigación, tiene como objetivos: Lograr que personas que viven con VIH asistieran más a sus citas médicas y llevarán mejor sus tratamientos al contar con una base complementaria de la recolección que hacían en los huertos para poder alimentarse, además, persigue una mejor socialización entre los participantes en el proyecto.
La decana de la facultad, doctora Rosel Fernández, encabezó la actividad junto al director de Investigación de esa unidad académica, doctor Ángel Díaz; la directora del Instituto de Investigación en Salud, doctora Ysabel Noemí Tejeda, y en representación de la Oficina Sectorial de Planificación y Desarrollo Institucional de la FCS (OSEPLANDI), doctora Julissa Alonzo, quienes desde sus distintas instancias han dado su apoyo a la investigación realizada a través del proyecto para Mejorar la Seguridad Alimentaria (ProMeSa).
Fernández resaltó la importancia de la iniciativa y reiteró su apoyo a la misma, por entender que en la actualidad la investigación es uno de los ejes principales al que debe prestar atención toda Universidad que busque desarrollarse y alcanzar un sitial de renombre en el campo de la educación superior.
De su lado, las investigadoras Derose y Then indicaron que como parte de la intervención se trabajó con dos centros de salud, uno localizado en la provincia de La Vega y el otro situado en Valverde de Mao, donde a las personas seleccionadas para el estudio se les ofrecieron consejería nutricional, entrenamiento para la creación de huertos, y un taller de cocina para utilizar los productos que se cosechan en el mismo.
El estudio mostró eficacia en la reducción de la inseguridad alimentaria, mejor socialización, y mejora en los resultados clínicos del VIH, lo cual podría ser adoptado para otras enfermedades donde la inseguridad alimentaria juegue un rol importante.
El Ministerio de Salud Pública, el Consejo Nacional para el VIH y el SIDA (CONAVIHSIDA), el Ministerio de Agricultura, el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, y el Instituto Nacional de la Salud de EE.UU., figuran entre las instituciones que financiaron el proyecto de investigación.