Polanco Melo externó sus condolencias a los familiares de la dama a quien calificó de esposa, madre y ciudadana ejemplar.

“El país pierde a una mujer de gran valía, una intelectual, una dramaturga y excelente ser humano que realizó grandes aportes al desarrollo cultural, literario y artístico de la República Dominicana”, indicó la máxima autoridad de la Primada de América.

Polanco Melo expresó que la comunidad universitaria eleva una plegaria al Todopoderoso para que conceda paz a su alma y conformidad a sus familiares y allegados.

Hija de español y cubana, nació en Santiago de Cuba el 29 de abril del 1915. Realizó sus estudios primarios en Barcelona, España en el colegio de las Teresianas y sus estudios secundarios en el instituto de 2da. Enseñanza de Santiago de Cuba. Llevó a cabo estudios de inglés y Secretariado en el Bussines Administration School de Kingston, Jamaica.

Quidiello de Bosch realizó estudios en Ciencias Sociales, en Filosofía y Letras en la Universidad de la Habana, postgrado en Derecho Diplomático; además laboró como asistente del Servicio Cultural en la Fundación Rockefeller en la ciudad de Nueva York.

Igualmente, fue profesora de inglés, en las escuelas públicas El Catarro de la Habana y en el poblado Santa María de Rosario, así como en el Colegio Alemán de Caracas, Venezuela.

En 1943 contrajo nupcias con el profesor y escritor Juan Bosch, quien luego sería presidente de la República. El matrimonio procreó dos hijos: Patricio y Bárbara.

Esposa y compañera de Juan Bosch durante 60 años, compartió con él todas las experiencias de su vida. Estas se inician en el exilio de 24 años durante la tiranía de Trujillo; después, 2 años por causa de la ocupación militar: y finalmente, luego de las elecciones del 1966, en un autoexilio de 4 años. Un total de 30 años de extrañamiento de la Patria que sufrió el escritor y político, siempre acompañado por Doña Carmen.

En todo momento estuvo permanentemente al lado de Don Juan, compartiendo sus faenas y vicisitudes, durante su fecunda y hermosa obra política, intelectual y humana, apartándola hasta el último momento de su vida, su solidaridad, su entrega y en especial, su lealtad y amor imperecederos.