La actividad tuvo como escenario el Museo de la UASD y la encabezó el vicerrector de Extensión, doctor Antonio Medina Calcaño, quienal hablar en nombre doctora Emma Polanco Melo felicitó al maestro Toribio y señaló que el acto reivindica a la mujer dominicana de la época y su aporte al proceso de liberación que nos legó nuestra independencia.
Expresó que eventos de este tipo reivindican la memoria histórica de la República Dominicana y que los afiches impresos sobre la imagen que representa el lienzo ya se agotaron, por lo cual se procederá a su reproducción a fin de ser enviados a todos los ministerios del país,
El decano de la Facultad de Humanidades, maestro Augusto Bravo, también felicitó al autor de la obra así como como a la unidad académica que facilitóde forma institucional la realización de la pintura, tras adelantar que solicitó a esa dependencia realizar la musicalización a las letras del himno que ya escribió la comisión del bicentenario de Rosa Duarte.
Al destacar la labor realizada por el publicista y catedrático Orestes Toribio, dijo que para la realización de esa obra el artista tuvo que auxiliarse de la historia, la investigación, la literatura y la pintura, a fin de poder realizar el hermoso lienzo de Rosa Duarte, de quien no teníamos imágenes, por las condiciones históricas de la época.
Señaló también que el retrato develado es un aporte significativo y un testimonio de la UASD, porque recuerda a una gran dama dominicana y con ella a todas aquellas que han sido olvidadasen una época de opresión por los que ocuparon la parte dominicana: por los haitianos, donde no se reconocía los derechos de las mujeres.
El maestro Toribio se inspiró en una fotografía de mediados del siglo XIX de Rosa Duarte y utiliza una referencia del artista español Federico de Madrazo y Kunt, con influencia del romanticismo francés, con un tratamiento angelical que es una forma de representar la pureza de la mujer y su pensamiento;
Se explicó que seutilizó una técnica madre al óleo para captar el espíritu de la época, con el color verde que representa la juventud el pensamiento revolucionario y esperanzador de Rosa Duarte, en tanto las joyas personifican a la clase a la cual pertenecía, mientras la piedra azul significa pureza de la mujer.
La imagen muestra que en los brazos de la heroína descansa la bandera dominicana, con los colores azul, rojo y blanco representan a la patria, mientras que en las manos sostiene tiene una rosa llamada Flor del jazmín de Malabartraída desde Venezuela y que fue utilizada por los Trinitarios como su símbolo
La coordinadora de la Comisión del bicentenario del Rosa protomártir Duarte Díez, maestra Petronila Dotel, se refirió a la vida y obra de la mujer que ofreció los datos más certeros, a través de sus escritos, del proceso realizado por los jóvenes Trinitarios, a quienes calificó como grandes contribuyente del proceso de liberación del yugo haitiano.
También la calificó como la mujer que más se involucró en el proceso creador de la República: en la gramática, y las fabricación de balas, renunciando a sus bienes familiares para ponerlos al servicio de la causa patriótica, convirtiéndose en la primera biógrafa política de la diáspora dominicana al escribir en su diario los momento claves de la vida de su hermano Juan Pablo Duarte y de todo el proceso.
En el acto también habló el decano de la Facultad de Artes, maestro Dionis Rufino, quien valorizó las uniones estratégicas interinstitucionales para el crecimiento de la academia estatal y agregó que resaltar el papel de la mujer en los hechos históricos es un deber de la Primera Universidad del Nuevo Mundo.
La comisión bicentenario de Rosa protomártir Duarte Díez está integrada por los maestros Augusto Bravo, decano de la Facultad de HumanidadesÁlvaro Caamaño, director de la escuela de Historia y Antropología; Petronila Dotel, coordinadora; así como los docentes Carmen Durán; Filiberto Cruz Sánchez, Juan de la Cruz, José Vásquez, entre otros.
A la actividad asistieron, además, el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, Alexi Martínez; junto a los maestros Álvaro Caamaño, director de la Escuela de Historia y Antropología; Félix Almonte, de Comunicación; Ana Jaqueline Ureña, de Psicología; René Olivares, de Diseño y la directora del Museo, Ángela Cava.