La actividad estuvo encabezada por la directora de la Escuela de Formación Docente para la Educación Media, maestra Griselda Rincón, quien resaltó que la Facultad de Ciencias de la Educación de la Primada de América salió de la Escuela de Pedagogía de Humanidades, pero creció y en la actualidad es una facultad con seis escuelas.
De su lado, la ex directora de la Escuela de Formación Docente para la Educación Media, maestra Miriam Gutiérrez, presentó al expositor calificándolo como un joven con gran talento que ingresó como profesor de la UASD a esta escuela, en el año 2014, y que también desempeña la función de técnico docente nacional y de encargado de evaluación y recursos para el aprendizaje del Ministerio de Educación.
En cambio, el maestro Vidal, durante su exposición, explicó que la docencia es por esencia una profesión exigente, especialmente en educación, pues –explicó- enseñar es un proceso caracterizado por una sólida y actualizada formación académica, llena de un profundo sentido de la ética personal y social que compromete plenamente al formador con su labor, valores y con el desarrollo de la comunidad para servir como ejemplo.
Añadió que la profesión docente tiene muchas dimensiones, entre ellas: la social, de valores, personal y didáctica, las cuales envuelven al formador y lo convierte en un docente donde quiera que esté y no sólo en el plantel escolar, porque ese perfil, acompañado de competencias, forma parte de una construcción social.
Señaló que esos requerimientos también van acompañados de una responsabilidad social personal, la que a su vez no se construye únicamente en las aulas, sino también en el entorno, ya que la población estudiantil actual está caracterizada por ser demandante, exigente y desafiante.
Resaltó que el maestro debe demostrar conocimiento y comprensión de la etapa biológica en la cual se encuentren sus estudiantes, de sus exigencias y de sus entornos, para saber cómo actuar con ellos y orientarlos, tanto a nivel académico como en su camino de identidad individual.