EDITORIAL
Próximo a cumplir cuarenta y cinco años de fundado, este medio de comunicación ha recorrido su existencia en tobogán.Ahora transita por un trayecto llano en que palmo a palmo se fortalece como un vehículo de comunicación institucional, destacando los valores más acendrados de la academia, difundiendo sus actuaciones en beneficio de la ciencia y la tecnología.
En esta etapa, con el reconocimiento de lectores y lectoras de todos los ámbitos de la vida universitaria y sectores externos a la misma, El Universitario exhibe marcas distintivas que aseguran su éxito actual y futuro. La decisión de la más alta autoridad de la Universidad, su rector, de evitar el uso del periódico como plataforma para el ejercicio del exhibicionismo personal, ha resultado favorable al mismo.
En este año El Universitario ha servido para contribuir a Relanzar la UASD, a través de la difusión de sus investigaciones, sus labores de extensión, sus relaciones con la Sociedad, sus aportes al gobierno y a los sectores productivos que mueven la economía del país. Una característica distintiva del periódico es que no se desecha. Quienes reciben el periódico lo conservan indefinidamente para tener a mano las valiosas informaciones que contiene. Con la próxima inserción de publicidad selectivamente recibida, la aspiración es aumentar su tirada, para llegar a un mayor número de lectores.
La UASD ha vivido dos semestres y un curso de verano en completa paz. Que esa paz continúe en el seno de las familias de todos los estudiantes, docentes y servidores universitarios y que el próximo año sea de progreso continuado para la Academia, instrumento por excelencia del pueblo dominicano para la defensa de las libertades ciudadanas, la promoción del saber y la movilidad social de los sectores de menores ingresos de la nación.