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Frei Betto es un incansable crítico del bloqueo a Cuba

Viernes, 16 Septiembre 2016 13:40 Visto 4367 veces

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Durante su participación en el VIII Encuentro, Frei Betto hizo una reseña de la situación socio-económica del continente, resaltando la grandeza del pueblo de Cuba y de su líder, Fidel Castro.

Domingo Batista

 

Carlos Alberto Libânio Christo es un nombre poco sonoro y que no despierta gran interés.

En cambio, cuando se menciona a Frei Betto en cualquier parte del globo terráqueo, inmediatamente se le identificará como un gran propulsor de los Derechos Humanos y uno de los integrantes del grupo ideológico de la Teología de la Liberación en América Latina.

De igual modo, nunca ha ocultado su acendrada identificación con la revolución socialista cubana, y ha combatido sin descanso el bloqueo económico de los Estados Unidos contra la mayor isla de las Antillas.

Precisamente, manifestando ese gesto de solidaridad para con los cubanos, y en el marco de la celebración del VIII Encuentro Continental de Solidaridad con Cuba, Betto estuvo nuevamente de visita en la República Dominicana y ofreció una muy comentada conferencia en donde reafirmó su convicción a favor de que cese la opresión a la patria de José Martí y Fidel Castro Ruz.

Esa conferencia, que fue parte del vasto programa de actividades que se verificó durante el evento, que se desarrolló del 28 al 30 de julio en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), con la activa participación de su Vicerrectoría de Extensión, que es dirigida por el maestro Rafael Nino Feliz.

Con un abarrotadoAuditorio Manuel del Cabral, de la primera universidad fundada en el continente americano, Betto hizo una amplia reseña de la situación socio-económica de los pueblos latinoamericanos y el carácter solidario de Cuba.

El hijo del periodista Antonio Carlos Veira Christo y la escritora Stella Libánico centró su exposición en afirmar que la mejor manera de ser solidario con la revolución cubana es preparar a la gente para cambiar a los pueblos oprimidos.

Señaló que la formación de la conciencia es vital para que los pueblos se liberen y puedan levantar la lucha para conseguir que quienes gobiernan en los Estados Unidos se vean precisados a poner fin a su política de acoso contra Cuba.

Consideró que el historial solidario de la nación caribeña obliga a que los demás países de América exijan a los estadounidenses cesar en su negativa acción.

Recordó que la principal potencia en América no ha podido impedir que una gran parte de los países del continente se identifiquen con la revolución cubana, porque esta ha sido solidaria.Dijo que Cuba ha estado presente en las luchas de esos países, enviando grandes cantidades de médicos y profesionales de otras áreas para que ayuden en el desarrollo social.

Asimismo, observó que -a pesar de sus grandes dificultades- los cubanos han desafiado las imposiciones del imperialismo norteamericano y se han sacrificado para mostrar su solidaridad con otros países del mundo.

Manifestó que asistía -una vez más- a un evento de esa característica para dar su apoyo al proceso revolucionario expresado por la dirección cubana.

Insistió en apuntar que el gesto de la solidaridad es una de las más altas expresiones de los seres humanos y puso de ejemplo la parábola de Jesucristo cuando una señora pobre que donó parte de lo poco que tenía.

Al tiempo de criticar el actual estado de cosas en el mundo, el religioso hizo énfasis en la necesidad de combatir el abuso contra el ecosistema y la situación económica y social por la que atraviesan millones de seres humanos.

En su exposición, Betto también resaltó el gesto del líder revolucionario Fidel Castro en favor de la desaparición del Apartheid en África del Sur, lo que le valió para que su hermano Raúl fuera el único presidente en hablar durante las honras fúnebres del inmortal luchador Nelson Mandela.

De igual modo, puso de relieve la identificación de los cubanos con la lucha de El Congo, América del Sur, Namibia y Angola, lugares en donde murieron en acción unos mil cubanos.

Betto también tuvo palabras de elogio para el comandante luchador Ernesto -Che- Guevara. Sobre el asesinado combatiente guerrillero argentino, el religioso destacó que este puede catalogarse como el San Francisco de Asís del siglo XX, por ser un gran solidario con la causa de los pobres.

Comentó que Guevara, uno de los principales comandantes de la revolución cubana, hizo un extraordinario trabajo en Guatemala, México, Chile y Bolivia y abandonó la posibilidad de ser rico para unirse a la liberación de El Congo y América del Sur.

Admitió que algunos de los gobiernos democráticos latinos no han hecho el trabajo de concientización ideológica con la gente pobre de sus respectivos países. Entiende que -al no hacer una labor concientizadora- esos gobiernos no han podido provocar un cambio de ideología en sus pueblos.

Aseveró que “cuando un gobierno garantiza únicamente los bienes materiales y no los ideológicos, entonces los pobladores de esos países no forman sus conciencias”.

Estimó que los norteamericanos no han podido barrer con la revolución cubana porque esta tiene una sólida base ideológica, que ha permitido que el efecto dominó no se haya reflejado en esa nación a raíz de la caída del Muro de Berlín y el rompimiento del Bloque Socialista que encabezaba Rusia.

Durante su conferencia magistral, el público presente en el Aula Magna aplaudió delirantemente sus expresiones.

 

CARLOS ALBERTO LIBÂNIO CHRISTO (FREI BETTO)

Nacido el 25 de agosto de 1944 en el poblado de Minas Gerais, perteneciente al Estado de Belo Horizonte, Brasil, a los 13 años ya estaba impulsando las luchas estudiantiles y sociales en su nación, siendo de los fundadores de la Juventud Revolucionaria Cristiana.

Varias han sido las veces que ha recibido encarcelamientos por su pronunciada protección a quienes aman la libertad y combaten las injusticias.
Al transcurrir sus primeros 20 años de existencia, abrazó la vocación sacerdotal y empezó un duro trajinar para hacer conciencia y plasmar en sus escritos la necesidad de impulsar un gran movimiento social que rompiera con los esquemas tradicionales de la iglesia católica.

Desde que fue ordenado como cura, se adentró más a la lucha por los pobres brasileños y de todo el mundo.

El destacado religioso ha sido ganador de los más prestigiosos premios y títulos internacionales por la defensa de los Derechos Humanos, Betto no ha vacilado en levantar su voz y llevar a cabo acciones para poner fin a la desigualdad del hombre.